El bajo nivel mostrado por el colombiano en el 2024 preocupa a los hinchas de Central. El nuevo sistema táctico implementado por Russo es desfavorable para el Bicho que además de una buena pretemporada tal vez deba cambiar de puesto para ser tenido en cuenta.
Jaminton Campaz fue uno de los jugadores más desequilibrantes de Rosario Central en la temporada 2023. El Bicho tuvo algunos partidos memorables como el triunfo 3-1 sobre River Plate en la decimotercera fecha del certamen donde literalmente le hizo lo que quiso a Santiago Simón, un volante por derecha devenido en marcador de punta en aquella ocasión. Para el partido de semifinales Martín Demichelis aprendió la lección y le puso un hombre encima todo el tiempo.
Fue el último destello que se le vio al talentoso jugador colombiano ya que a partir de allí su nivel fue bajando considerablemente hasta llegar al tortuoso 2024 cuando se perdió la pretemporada que estaban haciendo sus compañeros ya que las negociaciones entre Central, Gremio y el representante de Campaz se extendieron más de lo previsto inicialmente por lo que el Bicho recién se pudo incorporar al Canalla a fines de enero debutando frente a Banfield por la segunda fecha de la Copa de la Liga.
La idea de Russo era castigar al colombiano y que coma banco mientras se ponía a punto físicamente pero el mal rendimiento del equipo hizo que ese plan quede descartado rápidamente. El Bicho nunca sintió que su lugar en el equipo titular estuviese en peligro y no pudo levantar nunca su nivel. Es cierto que los rivales ya lo tienen estudiado y saben que si le dan un poco de ventaja la pasarán muy mal, por eso siempre lo marca de cerca un rival mientras otro jugador lo espera de manera escalonada para que no pueda prevalecer en el uno contra uno.
La falta de una preparación física adecuada es algo en lo que deberán poner énfasis tanto el cuerpo técnico de Rosario Central como el propio jugador ya que el Canalla no puede prescindir de las cualidades del jugador oriundo de Temuco. Otro aspecto que tendrán que definir el Bicho y Miguelo es su reconversión como futbolista ya que el 4-4-2 que vio en el último partido no favorece al estilo de juego del número 13.
Jugar con dos delanteros de manera permanente demandará una mayor asistencia por parte de los futbolistas más dotados del equipo. Para que ello suceda Russo deberá archivar el doble cinco y colocar dos carrileros para que hagan las bandas mientras que habrá un volante de creación por delante como Nacho Malcorra. Con ese nuevo esquema un extremo no tiene mucho sentido y al colombiano se le presentan tres opciones que deberán ser analizadas junto al entrenador:
- convertirse en carrilero: esta posibilidad le demandará un mayor esfuerzo físico ya que deberá acompañar a sus rivales hasta el final de la jugada para luego volver a posicionarse en ofensiva.
- jugar de enganche: ocasionalmente cumplió con esa función, pero hacerlo de manera fija llevará a que deba aprender los secretos del puesto y a largar la pelota rápido. Es una chance, pero a priori no es la mejor de todas.
- Ser el segundo delantero: si Marco Ruben y Agustín Módica pelean por el puesto de centrodelantero titular, entonces el Bicho deberá dirimir con Enzo Copetti para ser su acompañante. Campaz es veloz, guapo y astuto como para cumplir esa función.
Más allá de lo que decidan tanto Russo como Campaz, la realidad indica que el Bicho deberá hacer una pretemporada porque sin ella le será muy difícil poder ganar en el mano a mano frente a sus rivales. Central lo necesita y el colombiano sabe que esta vez no puede fallarle a su equipo.
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Fotos: gentileza Prensa Rosario Central
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