Rosario Central consiguió la primera victoria del campeonato al vencer a Independiente Rivadavia por 1-0 con gol de Tobías Cervera. Mal primer tiempo del Canalla aunque le bastaron sólo 15 minutos en la segunda etapa para establecer diferencias. Descomunal actuación de Jorge Broun. Lovera es fundamental pese a sus lagunas.
Era un partido difícil para Rosario central debido a los antecedentes que traía Independiente Rivadavia en sus primeros partidos en la máxima categoría del fútbol argentino. Los mendocinos habían caído 1-0 con Independiente en su debut y luego hilvanaron dos victorias seguidas (3-2 sobre Gimnasia y Esgrima La Plata en El Bosque y 2-0 sobre Huracán en Mendoza) que lo hicieron llegar hasta San Nicolás en una expectante tercera posición en la zona A de la Copa de la Liga.
Central venía golpeado emocionalmente luego de la durísima derrota frente a Talleres en el Kempes y debía mostrar algún signo de recuperación tanto anímica como futbolística. Y Miguel primero decidió parar a su equipo de una manera más clásica ya que le dijo adiós al 3-2-4-1 que presentó en la provincia mediterránea y volvió al 4-2-3-1 que tan buenos resultados le dio.
Y los cambios no fueron sólo en el dibujo táctico sino que también procedió a cambiar algunos nombres. Juan Cruz Komar, Elías Ocampo y Coyote Rodríguez (ambos de muy floja producción defensiva ante la T) dejaron el equipo para entren Carlos Quintana, el debutante Emanuel Coronel y Leandro Campaz.
Esto implicó que Gusa Sández vuelva a marcar sobre la banda izquierda y que el Bicho trate de asociarse con Malcorra y Lovera para abastecer a Luca Martínez Dupuy, algo que quedó solamente en intenciones ya que en la práctica nunca pudo hacerse porque la Lepra mendocina con Gastón Gil Romero como abanderado se encargó de obstaculizar todos los circuitos futbolísticos del Canalla.
Ese primer tiempo fue muy sufrido para Central ya que Independiente Rivadavia le había cedido el control del balón pero no tenía ni precisión ni dinámica por lo que casi nunca puedo romper el ordenado esquema táctico diseñado por Rodolfo De Paoli. Ni Kevin Ortíz ni Tomás O’Connor (en su partido más flojo en un largo tiempo) pudieron ser los dueños de la mitad de cancha y allí se explica el flojo primer tiempo del Canalla.
Malcorra estuvo falto de precisión, al Bicho Campaz aún le falta ritmo porque no realizó la pretemporada a la par de sus compañeros, Lovera fue de menor a mayor. Maxi es un crack que regala su talento a cuentagotas, cuando gambetea lleva a sus compañeros con él y en muchas ocasiones se pone el equipo al hombro. Es fundamental que ellos recuperen su mejor versión futbolera para la Copa Libertadores.
Miguel decidió no esperar e hizo cambios en el entretiempo. Adentro Mauricio Martínez y Pesadilla Cervera, afuera O’Connor y Martínez Dupuy. De entrada se paró de otro modo y tuvo 15 minutos de furia donde Maxi Lovera, Nacho Malcorra y Jaminton Campaz se encendieron e hicieron la diferencia con el gol de Tobías tras una asociación entre los tres talentosos que culminó con con un buscapié de Nacho para que Cervera empuje la pelota al fondo del arco.
La tarea de Carlos Quintana es para remarcar. El tipo es la reencarnación de Rambo o de Terminator ya que da la sensación que nada puede con él. El central viene disminuido físicamente y cada vez que entra a una cancha literalmente lo sacan en camilla. Se vive cortando la cara y el cuero cabelludo, soporta contracturas, golpes y otros malestares físicos sin quejarse, agarra la lanza para buscar hacer un gol y termina todo golpeado. Sin haber nacido en el club entiende perfectamente lo que es jugar en Central.
Las manos de Fatu
El arquero de Rosario Central viene mostrando un gran nivel desde que se adueñó del arco en el 2023 tras superar una lesión y ganarle el puesto a Gaspar Servio. Fatu fue decisivo para que la Acadé gane la Copa de la Liga 2023 y en este comienzo de temporada sigue rindiendo a gran nivel. Contra la Lepra mendocina no fue la excepción y tuvo una actuación que no olvidará jamás con dos atajadas que pueden entrar entra las mejores del torneo.
La primera fue apenas comenzado el encuentro. No hay peor cosa para un arquero que tener que intervenir de manera decisiva con el partido apenas comenzado ya que aún está frío y debe responder para sostener a su equipo. Algo de eso le pasó a Fatu ya que debió esforzarse para sacar del ángulo un bombazo de Luciano Abecasis que tenía destino de red. El guardavallas canalla mostró una gran fuerza de piernas y unos reflejos extraordinarios para salvar un gol que hubiese complicado los planes de su equipo.
Fatu tuvo un par de intervenciones más durante la primera etapa pero lo hecho ante Francisco Petrasso se lleva todos los aplausos. El cabezazo a quemarropa del defensor mendocino tenía destino inexorable de red pero Broun evitó el seguro empate de la Lepra al hacer gala de sus reflejos para sacar la pelota de la ratonera y sostener la ventaja parcial de su equipo.
Broun pasó de ser un arquero que no brindaba seguridad (ojo, condiciones para el puesto siempre tuvo) a ser un guardavallas que no sólo gana partidos sino también campeonatos. Y no muchos analistas ven esa metamorfosis sufrida por Fatu en los últimos meses.
¿Es el mejor arquero de la Liga Profesional en este momento? Es difícil responderlo ya que Franco Armani, Chiquito Romero y Guido Herrera andan muy bien pero Fatu no está lejos de la producción de ellos. Lo cierto es que el guardametas auriazul tiene un gran nivel desde que se quedó con el arco Canalla y su gran rendimiento le hará falta a Central en la próxima Copa Libertadores.
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Pocas vacaciones y mucho cansancio
Para analizar el paso de Rosario Central por esta Copa de la Liga 2024 hay que hacer hincapié en el título obtenido en diciembre del 2023 ya que competir hasta las vísperas de navidad (el partido por el Trofeo de Campeones frente a River Plate se jugó el 22 de diciembre) le quitó tiempo vacaciones y recuperación al plantel dirigido por Miguelo.
Los problemas que está teniendo el equipo se encuentran en parte allí y este año la competencia será intensa y sin cuartel por lo cual deberá retomar su nivel lo antes posible. En ese sentido la llegada de Jonatan Gómez es una buena noticia para el cuerpo técnico. los compromisos que se vienen serán difíciles y esta primera etapa culminará el 25 de febrero en el clásico frente a Newell’s en el Coloso Marcelo Bielsa.
El calendario será muy apretado en la primera parte del año debido a la realización de la Copa América (se jugará desde el 20 de junio al 14 de julio) que significará la despedida de Fideo Di María de la selección antes de sumarse al Canalla. Esta situación abrirá oportunidades para todo el plantel. Y se sabe que los equipos se arman de adentro hacia afuera. El campeón está de regreso.
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Fotos: gentileza Prensa Rosario Central.
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