La doble moral del periodismo porteñocéntrico

Los medios de Buenos Aires buscaron instalar que Tello cobró a favor de Central, que el gol de Fideo fue culpa de Brey y no mérito de Ángel y que Paredes jugó un partidazo a diferencia del número 11 que es ninguneado siempre.

Les duele y les molesta, así de simple y de complejo al mismo tiempo. Quisieran tenerlo jugando en el mundo Bover, algo que saben no ocurrirá jamás. Tienen una relación amor-odio con él pero no se privan de mostrar la hilacha y bajarle el precio fecha tras fecha.

De este lado del ring se encuentran Rosario Central y Angelito Di María y en el otro rincón los medios porteñocéntricos con un poder de fuego poderoso para causar el mayor daño posible a Fideo y a la institución de Arroyito, una pelea absolutamente desigual donde ya sabemos quienes tienen todas las de perder…

Primero trataron de instalar que la Acadé era el equipo del poder, luego pusieron en duda los penales a favor que tuvo el equipo de Holan en el inicio del torneo, siguieron con los tantos supuestamente ilícitos contra Newell’s primero y a con Boca después. Y en cada oportunidad quedó al descubierto la doble moral de estos medios.

Hacen mutis por el foro al momento de cuestionar a Facundo Tello, no dicen nada de que Edinson Cavani debió ser expulsado por un durísimo codazo en la cara del Pelado Quintana así como tampoco mencionan donde colocaba la bocha Paredes cada vez que ejecutaba un corner, cosa que sí hicieron con Di María hasta el hartazgo.

En medio de todo esto eligieron quemar a un pibe de veintidós años como Leandro Brey echándole la culpa por el gol de Angelito en lugar de elogiar al pateador que había cincelado una obra de arte a orillas del río Paraná. Angelus Fideus seguirá escupiendo de manera exquisita para que disfruten todos, incluidos sus detractores que simulan ser sus amigos por su paso por la selección nacional.

Claro, había que instalar que el cinco de Boca había jugado un partido descomunal (jugó bien en el segundo tiempo debido a que Malcorra había sido amonestado en el primero por lo cual Tello lo iba a rajar por tener mal aliento y entonces no pudo encimarlo más) para no resaltar el primer tiempo de ensueño que había jugado el flaco de la Perdriel en lo que fue su mejor actuación desde que regresó al balompié vernáculo.

En esta sátira de la realidad en la cual los medios son partícipes necesarios, buscan imponer una verdad totalmente tergiversada donde sólo muestran su odio a todo lo que venga fuera del universo Bover. Están logrando instalar que Di María es un llorón, un ventajero y un obsecuente de Chiqui Tapia para desmerecer su vuelta al club de sus amores.

Mueren porque Fideo les dé una nota, lo palmean, lo elogian y luego cuestionan cada una de sus acciones en los partidos que le toque jugar. Que Quintana y Malcorra en la barrera, que debió haber tirado los dos penales afuera, que la posición de la pelota ante el Xeneize y un largo etcétera sirven para ver como es la línea editorial de estos medios que es imposible dejar de consumir si vivís en el interior profundo de nuestro hermoso país.

Una persona que vive en Chascomús, Salsipuedes, Colonia Santa Rosa o Amaicha del Valle solamente puede conectarse al resto del mundo a través de la radio, internet o la televisión por cable. Y allí entran a jugar estos medios ya que no hay rincón de nuestra patria donde no lleguen. De ese modo forman opinión: «Paredes jugó un partidazo y Di María hizo un gol olímpico por culpa del arquero». ¿Te das cuenta como utilizan su poder para manipular a la gente? Así son y así seguirán siendo, totalmente retorcidos y perversos con una verdad completamente construida a su medida.

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