Rosario Central empató 1-1 con Tigre con un gol de Facundo Mallo en la última jugada del partido. Pésima puesta en escena, el Canalla da ventajas desde lo físico y lo futbolístico. El equipo se fue silbado del Gigante. Necesita un shock que lo haga reaccionar.
Si el técnico de la Acadé no fuese el extraordinario y amado Miguel Ángel Russo entonces estaría apareciendo en todos los medios de comunicación de la ciudad el cartelito que diga «ciclo terminado» pero como es Miguelo quien está a cargo de este proyecto que le devolvió la gloria a Central entonces ya hay un par de datos para analizar y tratar de calmar las aguas.
Maltratar ídolos es una constante en Arroyito que no se va a cambiar así nomás aunque ahora hay una buena posibilidad como para mostrar que las cosas cambiaron un poco en ese sentido. Edgardo Bauza y Ángel Tulio Zof fueron maltratados oportunamente por los directivos de turno. El Patón fue echado como un perro luego de obtener la Copa Argentina 2018 mientras que el Viejo era sistemáticamente despedido cuando al escribano Vesco se le ocurría que su ciclo estaba cumplido. Lo raro es que siempre volvía a buscarlo aunque le quedaban debiendo un montón de guita por las indemnizaciones que no le pagaban…
Central jugó el partido con una displicencia alarmante. Mauricio Martínez no robó una pelota durante el primer tiempo. Lovera, Campaz, Malcorra y Gómez se la pasaron haciendo un toquecito intrascendente que no lastimó nunca a Tigre y jamás le dieron una pelota de calidad a Agustín Módica para que pueda definir. El gol de Gonzalo Maroni dejó al descubierto un repliegue espantoso por parte del equipo mientras Caramelo le daba un par de metros de ventaja al hombre del Matador para que abra el marcador.
Fue tal el desbarajuste visto en la primera parte que Russo hizo cirugía mayor en el entretiempo: afuera el 16 y el 60 para romper el mediocampo con un único volante central y adentro Tomás O’Connor y Kevin Ortíz para volver a jugar con doble cinco. Un partido y medio duró la idea de Miguel de jugar con un solo volante de contención.
Ese cambio en el dibujo táctico del equipo y una actitud más proactiva por parte de los players (Coco Basile dixit) hicieron que Central reaccione un poco y que deje otra imagen. El Canalla tuvo más enjundia para llevarse por delante a su rival y meterlo contra su arco pero sin claridad ya que colectivamente el plantel no está rindiendo. Claro que estamos hablando (o escribiendo) sobre un equipo que pasó de mostrar un nivel paupérrimo a otro que jugó espantosamente mal…
La crisis futbolística del Canalla parece no haber tocado fondo ya que el retroceso respecto al partido frente a Caracas fue más que evidente. El encuentro frente a los venezolanos parece ser la excepción que confirma la regla de este presente nefasto del equipo de Miguel Ángel Russo. Central necesita reaccionar de manera urgente porque jugando así está a punto de perderlo todo…
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Fotos: gentileza Prensa Rosario Central
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