El Canalla tendrá que resolver en el país caribeño si es el elenco timorato y sin ideas que se vio en la Copa de la Liga o si puede superarse a sí mismo tal como lo viene haciendo en la Copa Libertadores. Con ganar y golear no alcanza ya que importará el juego que muestre.
El partido frente a Caracas FC le da una gran oportunidad a Rosario Central para decidir que clase de equipo quiere ser a partir de ahora: o el timorato y falto de ideas que deambuló por la Copa de la Liga 2024 o el que está haciendo un buen papel en la Copa Libertadores. Este encuentro encierra más importancia que sólo los tres puntos que están en juego entre el Canalla y los Demonios rojos.
La Acadé viene cumpliendo un buen papel en la Copa Libertadores ya que le ganó 1-0 como local a Peñarol en el debut e hizo una gran tarea frente al Atlético Mineiro pese a caer por 2-1 en Belo Horizonte.
Justamente el segundo tiempo del partido frente al Galo fue la mejor faena hecha por Central desde el comienzo de la temporada teniendo en cuenta el poderío del rival y que el encuentro lo jugó en condición de visitante, su talón de Aquiles en el 2024.
Allí se vio lo mejor de la sociedad entre Nacho Malcorra y el Bicho Campaz, los centrodelanteros (Tobías Cervera y Luca Martínez Dupuy) tuvieron chances de empatar el encuentro y mostró una fortaleza anímica interesante tras el segundo gol de Mineiro que le permitió ir en busca del empate pese al penalazo no sancionado contra Facundo Mallo en la última jugada del encuentro.
La misión del Canalla contra Caracas FC será mejorar lo hecho en las dos primeras fechas del torneo continental contra dos rivales de mayor jerarquía y prestigio que los Demonios rojos.
Un equipo con problemas
El plantel que dirige Miguel Ángel Russo está lejos de tener la variedad que disponen clubes con billetera más gorda como River Plate, Boca Juniors y Racing. Por ello su plantilla es más corta y el equipo titular debió afrontar los dos torneos (Copa de la Liga y Libertadores) de la mejor manera posible.
Su participación en el torneo argentino fue paupérrima ya que finalizó decimoprimero en la Zona A con quince puntos producto de cuatro triunfos, tres empates y siete derrotas. Muy poco para un campeón defensor del título.
Su mejor partido en el torneo lo jugaron los suplentes frente a River Plate por la fecha trece del campeonato. Central ganaba 1-0 con un golazo de Lautaro Giaccone pero todo se desmoronó cuando los titulares reemplazaron a los jugadores que comenzaron el partido ya que el Canalla se dejó llevar mansamente por delante y el Millonario lo terminó ganando 2-1.
La única alegría que Central le regaló al hincha en el 2024 fue el triunfo contra Newell’s Old Boys en el Coloso Marcelo Bielsa. Y la misma no se produjo por el nivel exhido por el equipo sino por haberle ganado al clásico rival en su cancha jugando muy feo.
Las tres G del fútbol
Ganar, gustar y golear componen el summum futbolero para cualquier hincha. Y algo de eso deberá mostrar en el Estadio Olímpico de la Universidad Central de Venezuela ya que con quedarse solamente con los tres puntos no alcanzará para lavar su imagen.
Tampoco le servirá ganar marcando una gran cantidad de goles sino que a estos hechos deberá adosarle buen juego para que el triunfo y que los goles sean consecuencia del mismo y no de errores del rival o de algún hecho fortuito.
Caracas FC es el rival más débil del grupo y por esa diferencia de jerarquía es que Central deberá tomar las riendas del encuentro desde el mismo momento en que la pelota comience a rodar.
Los Demonios rojos perdieron en el debut 4-1 con Atlético Mineiro en Venezuela y luego fueron vapuleados por Peñarol con un incuestionable 5-0 en el estadio Campeón del Siglo. El equipo dirigido ahora por Henry Meléndez lleva trece partidos sin conocer la victoria con siete derrotas y seis empates. ¿Podrá imponer su mayor jerarquía el Canalla? La respuesta la tiene el plantel dentro suyo.
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Fotos: gentileza Prensa Rosario Central
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