
El máximo goleador histórico de Rosario Central
Lisa y llanamente, Harry Hayes es el futbolista más representativo y exitoso de toda la historia de Rosario Central. Nadie más que el ganó tantos campeonatos ni hizo tantos goles con la gloriosa camiseta auriazul. Fue uno de los máximos exponentes de la escuela rosarina, esa de geniales y talentosos delanteros, que en las primeras décadas del siglo XX tanto se destacó en el naciente fútbol argentino. El maestro Harry Hayes no solo fue un grandísimo jugador, sino también un verdadero caballero dentro y fuera de la cancha, aspectos que lo hicieron querido y respetado por propios y extraños. Una vida dedicada a su amado Rosario Central, como ídolo, estrella, socio, dirigente y hasta director técnico.
El día martes 20 de enero de 1891 nació en la ciudad de Rosario, en el barrio del Arroyito, John Henry Hayes, el séptimo hijo de la pareja constituida por Richard Hayes y Mary Cooper, inmigrantes ingleses que arribaron a la República Argentina cerca de 1870. Los Hayes se establecieron como granjeros, trabajando la tierra en distintas colonias que se estaban formando al costado de las tierras atravesadas por las líneas del ferrocarril. Pasaron de la Colonia de Fraile Muerto (hoy Bell Ville) a Cañada de Gómez y para 1875 se encontraban establecidos en Rosario, ya que Richard, herrero de profesión, pasó a ser empleado del Ferrocarril Central Argentino. Es de suponer que, a raíz del empleo de Don Richard en el FCCA, el joven Harry se haya acercado desde temprano a las filas de Rosario Central. Su hermano William, diez años mayor, integró el equipo del Central Argentine en un amistoso de 1899, y el mismo Harry aparentemente participó, según consta en el Libro del Cincuentenario (1939), en una visita que realizó la segunda división de Rosario Central a Villa Constitución en 1903.
«Eran tiempos en que pagábamos para jugar. Había que ser socio del club y además empleado de los ferrocarriles para poder patear” decía Harry a quienes quisieran escucharlo.
Pero la historia más conocida, el vínculo más importante de Harry Hayes con el club de los talleres, da comienzo la noche del 19 de junio de 1905 cuando en la cuarta reunión de la recientemente fundada Liga Rosarina de Football se da lectura a una carta enviada por el mismo Harry, donde solicita el pase desde el club Argentino (hoy Gimnasia y Esgrima de Rosario) al “C.A. Central”. El consejo de la Liga dio el visto bueno para este pase, previo pago de los cinco pesos que se requería según el artículo número 23 del reglamento de la Asociación Argentina de Football. De esta manera, Harry Hayes se convirtió en el primer jugador en ser transferido de un club a otro en el fútbol rosarino.
A pesar de la falta de información que se tiene de esos años, el primer partido registrado donde figura Harry Hayes jugando para la primera de Rosario Central fue el 26 de agosto de 1906. Ese día, el futuro goleador se estrenó como titular por la semifinal de la Copa Chevallier Boutell, enfrentando al Belgrano Athletic en cancha del club Quilmes de la homónima ciudad bonaerense. Como un presagio de lo que se convertiría en el futuro, ese día Harry convirtió un gol para la escuadra que por entonces vestía camiseta azul. En 1907, la Liga Rosarina de Football creó la Copa Vila para equipos de primera división y como Rosario Central ya tenía un equipo en esa divisional que competía en copas nacionales desde 1903, logra que la Liga inscriba a un equipo llamado Central Extra para participar en la Copa Vila. En ese once hizo sus primeras armas como titular el joven Harry, compartiendo plantel con jugadores históricos como Victorino Pisso, Julio Cantón o Juan Díaz.
Pero la explosión de Harry Hayes se da en 1908, coincidiendo con el primer título oficial de Rosario Central. Ese año jugó catorce partidos oficiales y convirtió quince goles, tres de ellos a Newell´s Old Boys. Nervios de acero a la hora de definir, cintura infernal que dejaba maldiciendo a los defensores, calidad y precisión en pases cortos, un fuerte disparo y una gran fortaleza física conformaron un excelente perfil de quien fue el mejor jugador de la historia centralista.
En 1910, y con 19 años de edad, fue citado para integrar el seleccionado nacional que se disponía a realizar un amistoso ante Chile y a participar en la Copa del Centenario, de la cual Harry fue campeón y goleador. El vínculo de Harry Hayes con la blanquiceleste se tradujo no solo en los 8 goles convertidos en 21 partidos: el aprecio de la prensa y del público porteño llegó a un nivel sorprendente para un jugador rosarino. Incontables aplausos acompañaban a Harry cada vez que entraba en los campos de juego calzando la camiseta celesta y blanca de la Selección Argentina y el habilidoso delantero correspondía a esas demostraciones volcando en los partidos todo su arsenal técnico. Con la Selección Argentina ganó seis copas oficiales.
Junto a su amigo Zenón Díaz compartió grandes momentos en la historia centralista, siendo multicampeón del futbol rosarino y nacional y protagonizando distintas escenas futbolísticas que lo erigieron en figura principal de cada logro auriazul. El 8 de junio de 1913, por ejemplo, se jugó la segunda fecha de la Copa Vila de ese año y Rosario Central enfrentó a Embarcaderos Córdoba y Rosario, actual Argentino de Rosario. Con dos goles de Harry en el segundo tiempo, Central consiguió la segunda de las ocho victorias con las que se consagró campeón. En el equipo de Embarcaderos sufrieron a Harry dos jovencitos que serían futuras estrellas de Central, su hermano Ennis y Florencio Sarasíbar. En octubre del mismo año, Talleres llegó a la final de la Copa Competencia, enfrentando a Argentino de Quilmes. El partido se había estancado en un dos a dos hasta que faltando ocho minutos y después de varios intentos, Harry Hayes tomó la pelota luego de un centro de Flynn y derrotó a los defensas, al arquero y al campo totalmente embarrado para convertir el 3 a 2 y consagrarse por primera vez campeón nacional.
En 1914 Central regresó a la Liga Rosarina de Football y en ese torneo el maestro finalizó con unos números estelares, 40 goles convertidos en 18 partidos jugados. El 4 de octubre el once auriazul visitó la cancha de Tiro Federal y con una tripleta de Harry se consagró campeón rosarino de primera división. En la vibrante definición por la Copa Vila de 1919, el delantero estrella se hace presente con dos goles para que Rosario Central se corone campeón frente a Newell´s Old Boys. El equipo rojinegro lo sufrió en repetidas oportunidades, tanto es así que uno de los récords históricos que tiene el maestro Harry es el de ser el jugador que más goles le convirtió a los del Parque de la Independencia con la camiseta auriazul: se tienen registrados hasta el momento 24 goles en 26 partidos. El primer gol se los marcó un 2 de agosto de 1908. El último, el 11 de enero de 1920, cuando un doblete del Maestro sentó las bases de lo que sería la victoria por 3 a 2 que le daría a Central la obtención de la Copa Vila 1919.
El 12 de septiembre de 1926 Rosario Central visitó a Talleres, club fundado en 1923 por rebeldes socios centralistas, en la cancha que Argentino de Rosario tenía en Avellaneda y Gorriti. Esa tarde, Harry Hayes compartió delantera con el que sería su reemplazante como centrodelantero titular, Armando Bertey, quien convirtió cuatro goles del 8 a 0 final. Esa jornada histórica fue la despedida del Maestro, su última función y, como era lógico, se despidió de la mejor forma, con lo mejor que tenía para devolverle a la hinchada centralista todo el amor que le entregaba. Dos goles salidos de su enorme bagaje técnico fueron el regalo de Harry para su afición, ya que esa tarde de domingo colgó los botines para siempre, dejando atrás veinte años de carrera, más de doscientos partidos, cinco títulos nacionales, diez campeonatos rosarinos y el honor de ser el máximo goleador histórico de Rosario Central, un rótulo que difícilmente le puedan arrebatar.
Sin embargo, no terminó en ese momento el capítulo que une a John Henry Hayes con Rosario Central. A pesar de haber dejado el futbol en ese 1926, la influencia de tan enorme jugador siguió siendo de gran importancia en las actividades del Club, por lo que en 1928 la subcomisión de fútbol lo llamó para ofrecerle el cargo de entrenador del equipo de primera división. El ángel que acompañó a Harry durante toda su campaña como jugador, ese que lo llevó a ser el mejor delantero de Sudamérica, volvió a iluminarlo en su puesto de director técnico. Ese año Harry Hayes dirigió una gran campaña que culminó con el título de campeón de la Copa Vila 1928, el torneo más importante que jugaban los equipos rosarinos y que fue logrado ganando una final frente a su clásico rival, en la mismísima cancha rojinegra y ante la fría mirada derrotista de los locales. Por ese logro, Harry Hayes es, junto con Eduardo Blanco y Edgardo Bauza, una de las tres únicas personas en la historia de Rosario Central que se consagraron campeón como jugador y como director técnico.
Hasta el momento se registran 215 goles anotados por el magnífico delantero, teniendo en cuenta que de aquellos años falta información de los goleadores de una veintena de partidos jugados por Rosario Central, en los cuales es más que seguro Harry Hayes haya seguido con su sana costumbre de convertir. En la tabla de goleadores históricos de Rosario Central (si decimos histórico es desde 1889 hasta el día de hoy) primero está Harry, luego su hermano Ennis con 159 y en tercer lugar Marco Gastón Ruben, con sus famosos 106 tantos. Pero atención que aparte de ser el máximo anotador con la camiseta de Rosario Central, Harry es también el máximo campeón de la historia del Club, siendo partícipe de la obtención de cinco títulos oficiales nacionales y diez a nivel local. El mas goleador y el mas campeón.
Así de grande fue su trayectoria, así de grande fue Harry Hayes. El gran maestro.
GERMAN ALARCON

Descubre más desde El diario de Central
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.
Mi abuelo me contaba que era un jugadorazo