El Canalla jugará con River en una cancha que históricamente le es adversa. No se debe repetir la puesta en escena de la Bombonera.
Llegó el momento de afrontar el partido que más desconfianza le genera al hincha de Rosario Central ya que el Millonario es la bestia negra del Canalla a tal punto que el club de Arroyito solamente pudo imponerse en nueve oportunidades en la cancha ubicada en la avenida Figueroa Alcorta desde que se incorporó a los torneos de AFA en 1939. El resquemor por parte del simpatizante auriazul nace por las opacas actuaciones que tuvo el equipo ante este mismo rival en la Liga 2024 (perdió 4-0) y frente a Boca Juniors en el Torneo Apertura.
Ariel Holan es un gran entrenador pero en ambos casos debió parchar la formación inicial debido a problemas de lesiones. Eso hizo que sus peores producciones fueran en estos dos partidos. Hasta allí las excusas y la compresión porque la realidad muestra que cuando un equipo trata de defenderse visitando a estos rivales las cosas terminan muy mal. No duele la derrota en sí misma en La Bombonera sino los modos y las maneras.
Central salió a jugar frente al Xeneize totalmente derrotado desde lo psicológico ya que cuando el técnico quiso reparar su error inicial fue muy tarde. Jugó con un planteo que ni los propios jugadores terminaron de entender y que le simplificaron las cosas a un Boca que venía de ser eliminado por Alianza Lima en la Copa Libertadores. El Canalla no tuvo la viveza necesaria para sacar provecho de un estadio semivacío y con todo el público boquense dispuesto a lapidar a sus jugadores ante el primer contratiempo, eligió defenderse y resucitó a un equipo que estaba a punto de perder a su entrenador.
Habiendo visto estas dos puestas en escena en condiciones idénticas (jugando de visitante ante los dos clubes más poderosos de la Argentina) surgen las dudas para este partido frente a los dirigidos por Marcelo Gallardo ya que no es lo mismo perder dando una buena imagen que hacerlo mediante una actuación indecorosa. Los problemas que tiene Holan en el armado del equipo terminan condicionando toda la táctica ya que se conoció a último momento que Carlos Quintana y Facundo Mallo no serán de la partida.
Ante todo no debe repetirse lo hecho en La Boca, Central tiene que dejar una buena imagen en esta clase de partidos y más si el rival, en este caso River Plate, viene con algunas dificultades. Ganar está bueno pero demostrar que tiene un equipo competitivo es aún mejor. ¿Se animará el DT auriazul a romper el molde e ir a tratar de ganar el encuentro?
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Fotos: gentileza Prensa Rosario Central
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